Partituras

Falta de compromiso
Elba Nieves García /El Mundo de Tehuacán
México04 de mayo, 2008
Qué sucede en estos tiempos donde los jóvenes y algunos adultos cantan esta estrofa y se repiten una y otra vez que “no pueden prometer algo eterno, porque no pueden”.
La falta de compromiso no se refleja únicamente en una relación de pareja, empieza con la falta de compromiso con nosotros mismos, con nuestro medio ambiente y con nuestra ciudad.
Vivimos en una sociedad tan permisiva e individualista que parece que no necesitamos nada ni a nadie, nos olvidamos que somos seres sociales que interactuamos con otros, y esa interacción implica un compromiso y respeto.
El mundo actual nos presenta situaciones tan efímeras que olvidamos que también somos trascendentes y nuestras acciones u omisiones dejan huella y repercuten en la sociedad.
“Prometer amor eterno” es entregarse, creer y tener la convicción de seguir a una persona, institución o movimiento.
Y bien podríamos, por ejemplo, empezar a comprometernos con la naturaleza, cuidando el medio ambiente para revertir el calentamiento global que cada día sentimos con mayor intensidad.
Prometer amor eterno a la ciudad en la que vivimos, respetando las leyes y participando de manera activa desde nuestra propia trinchera.
Prometer amor eterno a nuestra Iglesia y a nuestro instituto o partido político, porque finalmente los principios, doctrina o ideario son nuestra creencia, a pesar de que existan personas en ellos que no la lleven a cabo. Esto lejos de decepcionarnos nos debe impulsar a participar para poner en marcha nuestra convicción.
Comprometernos también con nuestros amigos y familia, siendo leales, amorosos y solidarios.
Y sobre todo, prometernos amor eterno a nosotros mismos, conociéndonos, siendo congruentes y tomando decisiones.
Porque de eso se trata la vida, de comprometerse, amar y arriesgar.