Liderazgo

Liderazgo

Organización- Es
Hugo Antonio Avendaño /El Mundo de Tehuacán
México 11 de diciembre, 2009

Ese recurso tan escaso y a la vez tan necesario. Todas las comunidades lo necesitan.

Entender el concepto resulta fácil, apasionante y hasta se antoja obvio el aplicarlo.

Sin embargo, desarrollar el liderazgo es una tarea práctica.

Es como el músculo que se debe entrenar para alcanzar su máxima potencia, su máximo poder.

El enfoque de liderazgo ha cambiado sustancialmente en los últimos años. Ha pasado de la visión del carisma egocentrista al de servicio y colaboración.

El enfoque individualista – al que alguna vez le llamé “el sídrome de Rambo” por aquello del todopoderoso solitario que a todos vencía y a nadie necesitaba– ha quedado atrás.

Quedan aún los resquicios de quién en añoranza a esta

visión, continúa con un estilo de liderazgo que detiene el desarrollo de su empresa, de su organización, de su ámbito de gobierno.

La efectividad del liderazgo de servicio radica en la conquista humana. Esa disposición que implica dedicarle el tiempo necesario a las personas para entender su visión de la vida y una vez adentrándose en esa comprensión mutua, trabajar de manera colaborativa para el logro de objetivos comunes.

La comprensión de las distintas historias humanas, es un reto siempre apasionante para quién desde su liderazgo construye y va al encuentro del otro. Es tomar el riesgo de aceptar el rechazo, pero al mismo tiempo disfrutar de la apetecible promesa de encontrar una fructífera relación humana que facilite el trabajo.

La construcción del liderazgo dentro de las organizaciones siempre representará un objetivo prioritario.

Contra la corriente clásica, lo ideal es contar con un equipo de líderes y no con uno que otro iluminado que acaba por ser engañado por su propia percepción y por otros más quienes con su astuta inteligencia le manipulan desde la el aura de vanidad.

Aspirar al liderazgo debiera ser una vocación natural en todo ser humano.

Descubrir los talentos que marcan ese estilo de liderazgo es una tarea apasionante de autoconocimiento que haría de cualquier comunidad humana algo más solidario, generoso y civilizado. No en balde la máxima, “quién no vive para servir, no sirve para vivir”.